“Hoy empezamos con la solución de raíz contra las inundaciones del arroyo Las Víboras, y esa es una gran noticia para Hermosillo”, aseguró el presidente municipal Antonio Astiazarán, ante residentes de las 17 colonias que sufren inundaciones cuando se desborda algún segmento del referido cauce que cruza por gran parte de la ciudad.
Acompañado por Astarté Corro Ruiz, titular de la Coordinación de Infraestructura, Desarrollo Urbano y Ecología (CIDUE), Antonio Astiazarán compartió el impacto positivo de la construcción de conducto pluvial que en su momento mitigará el aporte de líquido a la cuenca Altares y en el cual se invertirán 12 millones 93 mil 360 pesos, del Fondo de Apoyo a la Infraestructura Social (FAIS).
Ofrecieron su testimonio como parte de las familias beneficiadas, Alejandro Islas, presidente del comité CRECES de la colonia Las Villas, y Antonio Palomera, integrante de la organización vecinal de la Colonia Cuauhtémoc.
El Presidente Municipal se refirió a dicha inversión como una gran apuesta, no solo en materia de protección civil, sino también por las pérdidas materiales y el estado de zozobra que enfrentan las familias próximas al arroyo cada que se evidencia que va a llover.
Hizo notar que la ampliación del drenaje pluvial para el conducto Altares es uno de los proyectos del Plan Estratégico de Drenaje Pluvial del Centro de Población, elaborado por un equipo de especialistas del Instituto Municipal de Planeación Urbana y del Espacio Público (IMPLAN).
Dicho documento contiene información detallada de las cuencas para Hermosillo, la infraestructura existente y los proyectos a corto, mediano y largo plazo que pueden resolver las afectaciones a esta capital y sus habitantes cuando ocurren lluvias abundantes.
“Esta es la primera etapa de una serie de inversiones que estamos haciendo en la ciudad para evitar estas inundaciones, todavía habrá agua que tendremos que desviar y otras obras que tendrán que hacerse después de esta para mejorar el flujo de avenidas”, aclaró.
La obra consistirá en la construcción sobre el bulevar Ernesto López Riesgo de cajas receptoras, módulos de parrillas; una boca de tormenta de concreto reforzado y un conducto rectangular del mismo material.
También la pavimentación de la vialidad intervenida con 691.48 metros cuadrados de concreto hidráulico de 20 centímetros de espesor; reubicación de infraestructura de drenaje sanitario y agua potable y señalización vertical y horizontal, explicó la Coordinadora de CIDUE.