La oficialista la Libertad Avanza (LLA) se imponía con 40.8 por ciento de los votos, seguida por la peronista Fuerza Patria con 34.7 por ciento, Provincias Unidas 7.5 por ciento, otros 7.5 por ciento, y el Frente de Izquierda 3.9 por ciento, en las elecciones legislativas celebradas este domingo, en un resultado impredecible, aunque muchas normas de las actuales formas democráticas fueron violentadas.
El presidente, Javier Milei, salió a festejar lo que considera una victoria en las elecciones legislativas nacionales al destacar el trabajo de fiscales y a sus votantes, lo logrado al utilizar la boleta única papel como una forma de “terminar con la trampa” en los comicios haciendo “que lo íbamos a hacer y lo hicimos, por un sistema democrático transparente”.
Con su característica de destacar a su gabinete a los que llamó “colosos”, “monumentales”, agradeciendo a todos los argentinos y retomando el lema de Donald Trump, festejando el acuerdo económico del que todavía no se ha informado nada a la población, por 20 mil millones de dólares.
“Hoy pasamos el punto bisagra, hoy comienza la construcción de la Argentina grande”, dijo Milei ante sus seguidores, ante quienes llegó cantando rock.
Concedió parte del crédito a Propuesta Republicana, con la cual “decidimos aunar fuerzas para derrotar al populismo”, y resaltó que se harán las reformas que “Argentina necesita para ser grande nuevamente”, con una evidente señal a su amigo Trump y al Fondo Monetario Internacional FMI para sostener el proyecto económico.
“Durante los próximos dos años tenemos que afianzar el camino reformista que emprendimos para dar vuelta de una vez y para siempre la historia argentina. Ahora estamos enfocados en llevar a cabo las reformas que Argentina necesita para consolidar el crecimiento y el despegue definitivo de Argentina, para hacer grande a Argentina nuevamente”, aseveró.
Las reformas anunciadas incluyen una “modernización laboral”, que se traducirá en una quita de derechos de los trabajadores, con beneficio a los empresarios, reforma tributaria tendiente a eliminar el pago de impuestos para los sectores más privilegiados y la reforma penal, con e un nuevo código contrario a las garantías mínimas establecidas en la Constitución y convenios internacionales.

“Quiero destacar el rol del nuevo Congreso porque a partir del 10 de diciembre contamos con 101 diputados en vez de 37 y en el Senado, con 20 en lugar de 6. Por ende, no dudo en decirles que a partir del 10 de diciembre, tendremos el Congreso mas reformista de la historia de Argentina”, declaró Milei.
Mencionó posibles alianza “por fuera de los inadaptados de siempre, que piensan que la economía se arregla con danza de lluvia, hay decenas de diputados y senadores con los que podemos encontrar acuerdos básicos. Nos alegra saber que en muchas provincias la segunda fuerza no es el kirchnerismo sino oficialismo provincial”, dijo al convocar a los gobernadores “con representación parlamentaria” a discutir acuerdos.
Milei cerró su discurso asegurando que LLA le sacó 14 puntos al kirchnerismo y, en clara alusión a los discursos de políticos en Estados Unidos, gritó “Que Dios bendiga a los argentinos”.
El gobierno de Milei no logró ganar los dos tercios de que necesitaba en la Cámara de Diputados y en el Senado si bien recuperó bancas, no logró la mayoría.
En esta situación hay que destacar un fraude informático ya que se violó la orden de la Cámara Federal Electoral, cuando el jefe de gabinete, Guillermo Franco, después de un largo autoelogio al considerar la eficiencia y transparencia que sólo esta administración ha alcanzado en el país, difundió resultados nacionales, indebidamente porque sólo podían darse estos resultados en las 24 provincias del país incluyendo la Capital Federal.
Se hizo una suma a nivel nacional para ese anuncio pero no se consideró lo mismo con el peronismo el que sólo iba como Fuerza Patria en la provincia de Buenos Aires y en otras bajo distintos nombres. Además estás son las elecciones legislativas con menor participación de los votantes, con una cifra de 66 por ciento, la más baja desde el retorno a la democracia, en 1983.
La Asociación de Corresponsales Extranjeros denunció la imposibilidad de acreditarse, la imposibilidad de estar en lugares antes permitidos, incluso en el llamado búnker de LLA, que funcionó en el Hotel Libertador, donde también estuvo alojado Milei, cuando ganó en 2023, y cuyo dueño es Eduardo Elztain, poderoso empresario y representante del sionismo en Argentina.
Al analizar la situación es evidente que la LLA logró engullir a una mayoría de militantes de la derechista Propuesta Republicana (PRO) a pesar de estar presidida por su asociado Mauricio Macri, gracias a que pudo ganar la capital ahora, con casi 50 por ciento de los votos, en un terreno que siempre votó a la derecha antiperonista.
Este lunes comenzará a surgir todo lo malo o lo bueno que estuvo detrás de estos comicios y habrá sin dudas denuncias y análisis sobre lo que viene para este país, que ya ha perdido una buena parte de su territorio y su soberanía e independencia.








